China ve el surgimiento del “poder del taxi”

El éxito de Chongqing taxistas huelga inspira por 'efecto copia' las huelgas en Gansu y Hainan.

www.chinaworker.info

17 de Noviembre de 2008.

Cientos de taxistas en la zona turística de Sanya, en la provincia de Hainan, se declararon en huelga durante cuatro días la semana pasada. En Yongdeng, una localidad en la provincia de Gansu, otros 160 taxistas terminaron una acción similar después de 48 horas, tras haber recibido garantías del gobierno del lugar que no habría represión contra los conductores.

"No había taxis en servicio en Sanya el miércoles, y decenas de taxistas se siguen reunidos en la sede de gobierno," informó la oficial agencia de noticias Xinhua. Al igual que en Chongqing, donde 8.000 conductores realizaron una huelga muy visible antes de la semana, tuvieron lugar enfrentamientos entre huelguistas y conductores que se negaron a tomar parte en la huelga. En Sanya, se informó de 20 vehículos dañados, y 28 de los huelguistas fueron detenidos por la policía. Medios de comunicación oficiales informaron de 103 taxis resultaron dañados y tres vehículos de la policía en Chongqing. La liberación de los detenidos huelguistas se convirtió en una de las principales demandas de la huelga de Sanya.

Los conductores están claramente se inspiraran en las acciones de los demás, a pesar de una distancia de miles de kilómetros. Esto es señal de alarma en Pekín. Como la revista Forbes señaló: "Una serie de huelgas de alta visibilidad en las ciudades, inusual para China, sugiere que la recesión económica ha disparado un caldero en ebullición social." Esta revista ha vinculado el aumento en las protestas de Beijing con los 4 billones de yuan del paquete de estímulo anunciado la semana pasada. La recesión económica que ha azotado a China con mayor fuerza de lo que la mayoría de los comentaristas esperaba hace sólo unos meses, también ha socavado la demanda de viajes en taxi. Los chinos comunes prefieren ahorrar dinero y esperar los autobuses, a que a menudo superpoblados, y más lentos. Esto hace que sea aún más difícil para los taxistas conseguir las carreras que necesitan a fin de satisfacer astronómicos gastos de alquiler y otros gastos generales.

Régimen Nervioso

En cada uno de estos casos, los taxistas movilizados parecen haber obligado a las autoridades a importantes concesiones. La cuestión central ha sido el elevado costo de alquiler pagado por los conductores a las compañías de taxi que poseen los vehículos y emiten licencias en nombre del gobierno local. Los servicios de taxi en la mayoría de las ciudades de China han sido privatizados o semi privatizados, con los conductores convertidos en trabajadores por cuenta propia como contratistas que trabajan para empresas comerciales taxi. Se trata de una correa sin fin para los conductores, que a menudo les obliga a trabajar más de doce horas al día, todos los días, a fin de pagar los honorarios de alquiler. Los cargos en el caso de Sanya son 7.200 yuan por mes, a pesar de una decisión del gobierno el 1 º de enero de rebajarlos a 5.300 yuan - una cifra que sigue siendo extraordinariamente alta. En Chongqing las tasas de los taxis variaban de 5.000 a 8.000 yuanes por mes, sin embargo, las compañías de taxi pagan sólo 1.000 yuanes a las autoridades de la ciudad, transformando la actividad en súper-rentable para este negocio antes ejecutado en su totalidad por empresas del gobierno.

Reflejando el nerviosismo del Estado de partido único en China a medida que la economía entra en un turbulento período de desaceleración y desinflado de las burbujas especulativas, tres funcionarios de transporte en Sanya incluido el director de transportes de la ciudad de renunciaron por "incumplimiento del deber" como un resultado de la huelga. El alcalde de la ciudad se reunió con los huelguistas a mediados de semana en un intento prematuro de que la huelga fuera desconvocada, diciéndoles: "Existen muchos problemas en nuestra gestión del transporte, y pido disculpas a los taxistas de la ciudad." La señal que esto envía es que la huelga y la solidaridad pueden obtener resultados incluso en un régimen dictatorial en virtud del cual las huelgas son formalmente ilegales.

Se trata de un efecto dominó de Chongqing, donde la huelga terminó después que los dirigentes provinciales incluidos Bo Xilai, miembro del Buró Político de China, intervinieron y prometieron a los conductores que los honorarios para el alquiler de sus vehículos se reducirían.

Otro tema de controversia ha sido la proliferación de taxis sin licencia, que compiten con los taxis con licencia. Autoridades en varias ciudades chinas ahora están reprimiendo alos vehículos sin licencia, evidentemente, por temor a nuevas movilizaciones. En Shanghai, los medios de comunicación locales informaron que diez taxis ilegales han sido incautadas y "compactados" en un compresor industrial como una "advertencia" para los operadores de taxi sin licencia. De hecho, algunos "sin licencia de taxi" se han convertido en "herramientas" para los funcionarios locales para acumular riqueza personal, pero la mayoría de los conductores "sin licencia de taxi" son campesinos sin tierra y trabajadores despedidos. Dado que aún no se pueden permitir la inversión en "licencia de taxi", tienen que trabajar "sin licencia de negocios" con bajos ingresos. Siempre han sido explotados y reprimidos por funcionarios locales y policías. 2 años atrás, en Shanghai un "taxista sin licencia" apuñaló y mató a un agente de tránsito, que estaba vestido de paisano como "cebo" para imponer multas. Fue realmente un campesino sin tierra de la provincia de Anhui y había obtenido dinero prestado para comprar ese coche sólo 2 meses antes. Los últimos disturbios en Shenzhen fueron causados también por el gobierno local al perseguir "automóviles y motocicletas sin licencia". Por lo tanto, no importa si tienen "licecia" o están "sin licencia" todos los conductores son explotados por los gobiernos locales, policías y empresas de taxis. Como trabajadores, deberían unirse y luchar juntos.

Hay simpatía general por las demandas de los taxistas en favor de un recorte en las tasas de alquiler, pero no para un aumento de los precios por uso de taxi, que algunos grupos de huelguistas han pedido. Lo que es más importante, sin embargo, es que los conductores en Sanya y Chongqing exigieron el derecho a crear una asociación de taxistas para que los represente en las relaciones con las compañías de taxi y las autoridades. Esta es una llamada a la formación de una organización sindical independiente. Se dice que las autoridades de Sanya han aceptado esta demanda, aunque, como la experiencia de otras luchas ha demostrado, sin duda, quieren tratar de neutralizar esta exigencia insistiendo en que cualquier nueva asociación este subordinada a los órganos sindicales oficiales estatales, u otro brazo del aparato del gobierno-partido.

Salven nuestros empleos

Los incidentes de "agitación masiva", es decir, las huelgas y los levantamientos de las zonas rurales han aumentado en China en los últimos años, provocados por los agravios que abarcan; la corrupción oficial, los conflictos salariales, las incautaciones de tierras, y las cuestiones ambientales. El ritmo de esas protestas parece que ha aumentado drásticamente en las últimas semanas. La semana pasada, el ministro de Seguridad Pública, Meng Jianzhu advirtió a la policía para evitar "errores" en la tramitación de las protestas callejeras, en un artículo inusualmente franco en la revista del gobernante Partido Comunista, ‘Búsqueda de la Verdad’. Sostuvo que las autoridades deben ejercer "tres advertencias" en el despliegue de la policía, las armas y la fuerza coercitiva. Esta declaración resume los temores de las autoridades de tener que hacer frente a una posible explosión de disturbios en caso de que los funcionarios o las fuerzas estatales actúen agresivamente contra las protestas populares incluidas las huelgas. También explica por qué las huelgas de los taxistas de los últimos días han sido tratadas con relativa moderación para los estándares del gobierno chino.

En un solo día, el 10 de noviembre, considerables protestas estallaron en varias provincias al mismo tiempo. En Hebei Malanzhuang la ciudad, una multitud protestó fuera de las oficinas del gobierno después de un campesino fue asesinado por pandilleros en una lucha por la incautación de tierras con la mafia local. En una fábrica de motores diesel en Jiangyan, provincia de Jiangsu, unos 2000 trabajadores salieron a la calle y sitiaron el ayuntamiento, gritando "Salven nuestros puestos de trabajo”. Debido a la recesión en la economía, la planta en cuestión tiene previsto despedir a miles de trabajadores. Sin embargo, también se cree que su jefe ha huido con alrededor de 100 millones de yuan (14 millones de dólares de EE.UU. ), parte del cual se dice que es del "fondo de pensiones” de los trabajadores. En Shenzhen, provincia de Guangdong, diferentes grupos de trabajadores atrapados en un dilema similar han venido manifestándose a diario fuera de diversas oficinas gubernamentales. El viernes se informó de enfrentamientos callejeros con la policía antidisturbios. El South China Morning Post dijo que más de una docena de trabajadores que protestaban resultaron heridos.